Otra de mis letras. Es un poco larga. Espero puedan percibir el
sentimiento de ese momento. B
esos
Iann
N u e s t r o L a b e r i n t o
Hoy vibró su voz, al teléfono
decidida y clara
como si nada enturbiara
su laberinto interior...
Mi corazón recién entonces
cual simbiosis extraña
respiraba nuevamente,
recordaba...
Era su voz que lo calmaba!
que lo llenaba,
y que le daba la vida
que antes le quitara...
Recuerdo hoy la emoción
de sentir vibrar su pecho,
de compartir tantas noches
con precioso diapasón.
Vivà cada momento,
cada segundo compartido,
cual si fuera el último
orbitando en su sistema...
Temà dormir y perder conciencia
de que yacÃa sobre mi pecho
sobre mi vida,
sobre mi tiempo.
Y pasaron las noches
y los dÃas
que siempre se vestÃan
de igual manera:
En el ocaso, juntos en su lecho
hubo risas, hubo llanto,
concurrencia de seres invisibles
que poblaron nuestro pasado.
Estuvo la experiencia de la unión,
de ser una y la misma cosa
fundidos en la música y la rosa
y en el azul que Dios puso
en nuestro Universo.
Más al amanecer
muy distinta era la trama.
La tela se encogÃa
y su color cambiaba...
Al nacer el nuevo dÃa
quien dijera, que su corazón
de frialdad se vistiera,
que su luz apagara...
Que ya no estuviera aquello
al cual la noche acunara
y tanto calor desplegaba.
Y luego, otra noche crecÃa.
Nuevamente, todo maduraba
y se extendÃa, sin lÃmites
por nuestra pequeña alcoba.
Pensé, o quise pensar
que algún futuro habÃa
que era posible hacer pie
donde ni base existÃa.
Hoy, al escuchar su voz
le pedà sinceridad,
que me dijera su Ley
y como la iba a aplicar.
Mi futuro es incierto
â€'me dijoâ€', y no sé
cual montaña escalar,
quiéreme asà o déjame
tu amistad...
Y yo pensé:
Mi corazón no es de muchos
es de todos,
y es de Dios.
Y a él quiero llegar, algún dÃa
con dignidad.
Quiero vibrar en Su pureza,
en Su humildad, en Su ArmonÃa
y saber que cada dÃa
doy lo mejor de mÃ...
Doy lo mejor de mÃ.
No quiero atrapar el vacÃo
de una vida sin objetivos.
Mi vida no ha de medirse
por años, sino por obras
y trataré de cruzarla
en toda su dimensión
no como puente
sino como oportunidad,
y como bendición.
Caeré, estoy seguro,
pero será de vez en cuando,
más siempre estaré tratando
de proyectar en mi entorno
la Verdad que he recogido
caminando, caminando...
Entonces, al fin la flor
emitirá su fragancia,
el gusano desplegará sus alas
y todo tendrá el brillo,
y la transparencia de la pureza,
del amor sin lÃmites
que habita en nuestra Esencia.
Por eso no puedo aceptar
vivir a medias mi vida,
la misma ha de ser compartida
con amor, con armonÃa,
con errores y suavidad
ya que lo duro perece.
Pero no por eso faltará:
el timón de la realidad,
la búsqueda del sentimiento
por encima de lo demás,
y el poner lÃmites
a lo que me hace pequeño,
porque es este mi sueño
ser un hombre de verdad...
Hoy, al final de este
nuestro camino
puedo decir que amo
a las dos...
A la dama de la noche:
atenta, cálida, fraternal
y a la del amanecer
hermosa, radiante y frÃa.
Y que en esta conjunción
de Luna y Sol,
en raro manantial
de dicha y dolor,
tu miel me sabe amarga
Re: Prosa: Nuestro
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