El verdadero camino es el del volver hacia el CENTRO.
Asi lo indica casi todo simbolo religioso y filosofico.
Es un camino esoterico (interno) de reconocimiento, de entrega,
de agradecimiento y confianza.
Nada externo nos puede dar la alegria y la paz que necesitamos,
solo puede paliar un poco el sufrimiento y darnos la ilusion de estar
integrados, pero nada mas.
La soledad luego golpea de nuevo por sentirnos desintegrados,
parados en una mente dual.
Al viajar hacia nuestro centro a base de buenas acciones, y de
perdonar, observar sin juzgar, orar, llegamos a estar en comunion
con nuestra esencia,que, como toda esencia es PURA.
La VERDAD esta mas alla del bien y del mal, esta en el AMOR, en
esa ENERGIA que va creando el UNIVERSO y que brilla con luz propia.