Pekín y la vecina provincia de Hebei experimentaron en las
últimas 24 horas la mayor lluvia de primavera pero lograda con tecnología,
informó la agencia oficial Xinhua.
Con orgullo, un funcionario de la Oficina Municipal
Meteorológica de Pekín, destacó que tecnológicamente se había logrado la lluvia
más abundante y de mayor duración.
Las operaciones para provocar la lluvia comenzaron en Pekín
dos horas antes que en las ciudades de Zhangjiakou y posteriormente la de
Chengde, ambas en la vecina Hebei, precisó el funcionario.
Las bases de control meteorológico lanzaron cohetes y
dispararon proyectiles que contienen yoduro de plata contra las nubes para
desencadenar las precipitaciones, detalló el responsable.
"El objetivo es que la lluvia alivie la reciente sequía y
frene las tormentas de arena", manifestó.
Las provincias septentrionales de China afrontan una sequía
en aumento que ha causado graves problemas de escasez de agua para la población,
el ganado y los cultivos de estas regiones.
En Hebei más de tres millones de hectáreas de tierras de
cultivo están afectadas por la sequía y los residentes de algunas zonas sufren
restricciones de agua potable.
Según Xinhua, China cuenta con 6.781 cañones y 4.110
lanzacohetes en su arsenal para provocar lluvia artificial, y efectuó 4.231
vuelos con este objetivo entre 1995 y 2003, según la Administración
Meteorológica de China.
EFE