Muchos católicos sienten que el Adviento se les escapa: la Navidad lo devora,
es más corto que la Cuaresma. Debería incluir momentos de tranquilidad y
reflexión, de preparación espiritual, pero suele estar colonizado por
actividades prenavideñas y cenas de empresa y gestiones para la familia.
Mike Jordan Laskey, director de los ministerios Life&Justice en la diócesis de
Camden, New Jersey, publicó en el NCRonline.org algunas ideas de Adviento
para "católicos atareados".
1. Lee algo devocional, corto, cada día... coméntalo con más gente
Puedes juntar a tu familia, o a tu cónyuge, y leer juntos cada día algo muy
breve de tema espiritual.
También es posible ponerse de acuerdo con unos amigos para leer cada uno en su
casa algún librito espiritual y quedar luego todos en alguna casa para
comentarlo.
Jordan cuenta que lo propusieron a unos amigos, con poco tiempo, y 10
personas participaron. "La gente tiene hambre de algo de nutrición
espiritual, especialmente en estas fechas", concluyó.
2. Consigue ratos para estar en silencio
Adviento es una época cristiana de silencio y cierta oscuridad, en
contraste con la Navidad consumista que es alborotadora y llena de
luces. Hay que buscar ratos de silencio "que no sean la hora de ir a la
cama. Quizá basta con repetir la oración 'Ven, Señor Jesús' en voz baja,
lentamente, mientras respiras con los ojos cerrados. Esto se puede hacer en tu
cocina, en tu oficina..."
3. Di "no" a tantas invitaciones, está bien hacerlo
No es obligatorio ir a todas las fiestas a las que nos invitan estos días,
ni ir al centro comercial continuamente a por regalos. Podemos ir a
menos sitios. Sin embargo, padres y abuelos de niños sí deberían
acompañarles a algunas actividades importantes de estas fechas. Hay que
discernir.
4. Busca música de adviento: canciones que invitan a Jesús
"Ven, divino Mesías", "Emnanuel", etc... son frases que invocan y anhelan la
venida de Jesús, que es el gran tema del Adviento.
5. Decora algo ya, un poco
En casa o en otros ambientes de trabajo e iglesia ya puedes poner
algunos decorados navideños. Quizá basta con poner el belén. Quizá ya
puedes poner el árbol.
6. Pon la Corona de Adviento, enciende sus velas
Esta costumbre se ha extendido por muchas parroquias y puede
aplicarse también a las casas. Cada domingo se enciende una vela más
hasta la Navidad. La familia, al imitar este gesto visto en la
parroquia, toma conciencia de ser "iglesia doméstica".
7. Si tienes niños, léeles textos navideños
Incluso libros de dibujos para niños pequeños, de o tres años, les
van a servir mucho, porque luego llegará la Navidad, reconocerán los
personajes y las escenas. En los libros ven la historia que se cuenta
también en el belén.
8. Sé generoso y apoya obras que trabajan por el Reino y la justicia
Los Reyes Magos viajaban con sus regalos, y también nosotros debemos
poder presentar a Jesús nuestras ofrendas de caridad, ayudando a
Cáritas, a los misioneros, ayudando a los que anuncian la buena nueva...
9. Puedes confesarte
Hay en EEUU programas de móvil e Internet que registran que en Adviento, como
en Cuaresma, se disparan las búsquedas con las palabras "acto de contrición".
Mucha gente intenta confesarse en Adviento para llegar "limpio" a la
Navidad. El Adviento consiste en prepararse, y sin duda es la mejor
preparación posible hacer examen de conciencia y pasar por el
confesionario.
10. Recuerda las 3 venidas del Señor Jesús
San Bernardo de Claraval solía predicar sobre las tres venidas de Jesús:
-
Jesús vino como Niño en Belén
- Jesús viene a nuestras vidas hoy
- Jesús vendrá
con gloria en el Día Final
En Adviento, preparamos las tres venidas y reflexionamos sobre las tres.
Al final, todo esto ayuda a ponernos en una actitud de humildad y
gratitud ante el Señor, invitar al Espíritu Santo en nuestras vidas y
prepararnos para responderle. Ven, Señor Jesús.
(Publicado originariamente en ReL en diciembre de 2019)