Agentes de la Policía Nacional han desarticulado una banda que extorsionaba a
empresarios en nombre de ETA. La operación ha culminado con la detención en
Madrid de cinco personas presuntamente implicadas en el envío masivo de cartas
de extorsión a las principales empresas españolas, a las que exigían el pago de
15.000 ó 50.000 euros.
La operación ha sido realizada por la Unidad Central de Delincuencia
Especializada y Violenta (UDEV), con la colaboración del Grupo Especial de
Operaciones (GEO) y de la Brigada de Investigación Tecnológica.
La coordinación con todas las dependencias policiales y otros cuerpos
policiales (Guardia Civil y Mossos d´Esquadra) ha sido decisiva a fin de
recopilar la denuncias y conducir la investigación hacia el Grupo de Secuestros
y Extorsiones de la UDEV Central.
Los investigadores, tras recibir las primeras denuncias el 7 de enero, se
reunieron con algunos de los empresarios extorsionados para tranquilizarles y
comunicarles que todo indicaba que ésa no era una actuación de la banda
terrorista. Igualmente se requirió su colaboración en la investigación, que ha
culminado con la detención de los cinco miembros de la banda en menos de diez
días.
La Policía Nacional solicita a todos los empresarios que hayan recibido
alguna misiva de estas características que denuncien los hechos en cualquier
dependencia policial con el fin de imputar a sus autores todos los delitos
cometidos.
Inicio de la investigación
La primera noticia que se tuvo de las falsas cartas de ETA fue el pasado
lunes, 7 de enero, a través del grupo de Secuestros y Extorsiones de los Mossos
d´Esquadra. Tres empresarios denunciaron haber recibido una carta a su nombre
con los sellos de ETA fechada el día 2 de enero.
Ese mismo día por la tarde y, sobre todo, los días siguientes se tuvo
conocimiento de numerosas denuncias similares por todo el territorio
nacional.
Las cartas contenían amenazas como “la Organización Euskadi Ta Askatasuna le
hace saber que le considera parte de los responsables de la actual situación de
conflicto ... por ello ETA le considera objetivo de su accionar armado y le
exige un pago de ...” para la pequeña y media empresa era de 15.000 € y para las
empresas nacionales ascendía a 50.000€ por persona destinataria de la
misiva.
Además, incluían las instrucciones para pagar la cantidad solicitada. Para
ello, las víctimas debían enviar un SMS a un teléfono móvil indicando una serie
de datos y, posteriormente, recibirían por el mismo procedimiento los detalles
para el pago.
Si en un plazo de 24 horas no se recibía respuesta por parte del empresario
extorsionado, se haría “acreedor de las medidas que ETA decida aplicar sobre
usted, sus bienes y familiares, convirtiéndose en objetivo operativo de nuestro
brazo armado...”
Se ha detectado una primera remesa de unas 40 cartas y otra, con fecha 8 de
enero, en el que se añadía la frase “puede que se sienta seguro, pero créame que
no lo está”.
Investigación del Grupo de Secuestros
La información recibida por los diferentes cuerpos policiales fue
centralizada y analizada por el Grupo de Secuestros y Extorsiones, y se evaluó
la posibilidad de incluir negociadores de la Policía Nacional.
De este modo, se inició una negociación policial en nombre de dos empresas
que se prestaron a la colaboración. Mientras se desarrollaban estas
negociaciones, el Grupo de Investigación averiguó que el teléfono que utilizaba
para los contactos no era de una compañía de telefonía nacional, lo cual
dificultaba enormemente las investigaciones. Finalmente se logró determinar que
la única posibilidad era que procediese de un teléfono de la República
Dominicana.
Las instrucciones para el pago indicaban la manera de entregar el dinero, la
persona que lo iba a recibir, la hora y el lugar elegido, siempre en el centro
de Madrid.
El pasado martes día 15 de enero se concertó una entrega de dinero en
billetes de 100 €, metido en bolsas de plástico, dentro de un cuarto de basura
de una finca en una céntrica calle de la capital. En esta ocasión, el GEO detuvo
a dos ciudadanos brasileños que entraron a cobrar el dinero.
Detención de los autores de las cartas
Tras el arresto de los brasileños cesaron las comunicaciones, lo cual hacía
entrever su relación con los autores de las cartas y los mensajes. Alertado por
la detención de los “cobradores” cesaron las negociaciones. No obstante, a raíz
de las pruebas con las que contaban los investigadores, se logró identificar a
un hombre, dedicado a la importación de productos electrónicos procedentes de
China, y con domicilio en la República Dominicana.
Tras situar los diferentes domicilios de su empresa en Madrid fue localizado
por los agentes y detenido junto a otras dos empleadas. Entonces, se logró
averiguar que, además de los que ya se conocían, disponía de otro piso, que no
figura en ninguna bases de datos, en el mismo inmueble donde requerían el pago y
se detuvo a los brasileños.
En los registros realizados se han incautado el teléfono utilizado para
comunicar con las empresas, así como distinto material informático a la espera
de su estudio, sellos y cartas y una lista de empresas con teléfonos y
direcciones en la que figuran las empresas extorsionadas.
De la declaración prestada por una de las detenidas, reconoce haber comprado
y puesto el sello adhesivo en al menos 85 cartas.
Hasta el momento continúan las investigaciones para cerrar las líneas de
investigación entre los detenidos y su presunta pertenencia o colaboración con
banda armada sin que se haya encontrado elemento alguno que lo confirme.
Detenidos
- M.A.D.O.S., de nacionalidad brasileña y 32 años.
- M.P.M.R., nacido en Brasil en 1.985.
- J.G.V., nacido en Sevilla, de 32 años
- M.T.F.R., nacida en Santo Domingo (República Dominicana) en
1.984
- H.P.P.C., nacida en Santo Domingo (República Dominicana) de 26 años
de edad.