
Las
antiguas profecías de las Amérikas hablan de un nuevo ser humano en el planeta
- aquél que vive libre de miedo y reside en su naturaleza trascendental. El
Munay-Ki contiene los códigos de este nuevo ser humano. Dichos códigos son
entregados a través de "transmisiones o iniciaciones energéticas", en
forma de "semillas", siendo labor y responsabilidad de cada quien
germinarlas, crecerlas y actualizarlas.
Conforme recibimos el Munay-Ki nuestros chakras se aclararan y vamos
adquiriendo lo que los LaYkas conocen como "el cuerpo de arco iris".
Sucede cuando nuestros chakras irradian su luz original. Recordemos que cada
chakra tiene un color y cuando todos brillan en su color original emiten los
colores del arco iris. Cuando nuestros chakras han sido "ensuciados"
por traumas pasados, de esta u otras vidas, nuestro el aura adquieren un tono
grisáceo y nuestros chakras se vuelven "albercas de desperdicio"
psíquico. Una vez que adquirimos el cuerpo de arco iris, los Guardianes de la
Tierra pueden conectarse con nosotros porque reconocen que tenemos un llamado y
visión en común. Cuando esto sucede y si hemos desarrollado la habilidad de ver
el mundo invisible, podemos discernir las formas físicas de estos seres
luminosos.
Cada uno
de estos ritos y arquetipos son transmitidos a nuestra aura y chakras en forma
de semilla.
Dichas
semillas germinan con fuego y tenemos que realizar meditaciones de fuego para
despertarlas y hacerlas germinar y crecer.
Ayudan a
limpiar el "lodo" psíquico de nuestros chakras para que éstos puedan
brillar con su luz original conforme adquirimos el cuerpo arco iris. Estos
ritos nos ayudan a soltar el pasado de la misma forma en la que la serpiente
cambia de piel.
Cuando recibimos estos ritos quedamos a cargo del cuidado del tiempo venidero y
de todas las generaciones futuras.
Viernes 25 de octubre 17 a 21.30 hs.
Sábado 26 y domingo 27 de octubre 10 a 18 hs.
Maipe,
la Calderilla. Salta, Argentina