Un error que cometen los padres todo el tiempo ocurre en las mañanas de Lunes cuando han pasado todo el fin de semana con sus hijos y han pasado de maravillas. Cuando el niño tiene quizás tres o cuatro y le pide a los padres para que se queden en casa, los padres dicen algo como "Cariño, te amo muchísimo y odio tener que dejarte. Odio que tengo que ir a trabajar pero tengo que ir a trabajar para ganar dinero." Ahí le has enseñado a tu hijo a odiar el trabajo y odiar el dinero. En su lugar, puedes decir "Te amo muchísimo pero mamá está feliz de ir a trabajar. Porque voy a trabajar, gano dinero. Porque gano dinero, podemos hacer todas las cosas divertidas que hicimos el fin de semana. ¿No es genial?"
- Suze Orman
--
Para acceder a más opciones, visita https://groups.google.com/d/optout.