Lectura
"Un árbol no
puede luchar con otro árbol, sabiendo que está unido por el mismo suelo",
y nosotros que somos seres humanos y estamos enraizados en la conciencia
de Dios: ¿Cómo vamos a luchar? Es antinatural, es anti
antisocial. Bien, esto, entiendo yo, es lo que hay que hacer. Pasar
de lo subjetivo a lo objetivo, es Irradiar aquel propósito insigne que nos
da Vida y nos sitúa más allá de nosotros mismos. id="yiv1170209536yui_3_16_0_1_1455928800523_2615">œEl
Trabajo del Discípulo Aquí y Ahora
Oberá,
Provincia de Misiones, Argentina - 8 de Noviembre de 1985
Vicente
Beltrán Anglada
Interlocutor.
” ¿Es correcto abrir ahora el trabajo esotérico y hacerlo exotérico? ¿Si
al trabajo esotérico es necesario en estos momentos, por sus grupos de
trabajo, hacerlo exotérico o sea expandirlo, como en cierto modo está
aconsejando el Maestro?
Vicente.
” Sin darnos cuenta ya lo estamos haciendo. Yo jamás había visto grupos
esotéricos de índole tan diversa reunirse para escuchar algo que les
interesa profundamente a cada grupo esotérico, que es establecer un
vínculo de Unidad con los demás grupos. Creo que el Maestro dijo en cierta
ocasión: "Si el diablo hace las cosas bien, Yo voy a ayudarlo." ¿Se dan
cuenta de la situación? Pues qué no será cuando existan grupos místicos,
espirituales, sea cual fuere su forma de actividad, sea cual fuere su tipo
de estructura, que desean trabajar juntos para crear un sentimiento de
Unidad dentro del grupo y dentro de una unificación de grupos. Esto
constituye una tarea tremenda, porque tiene que ver con la
disposición de cada grupo y dentro de cada grupo con la disposición
individual, para no ofrecer resistencia a esta tremenda fuerza que ha
invadido a todos los grupos, porque se ha adueñado casi totalmente de la
humanidad y como que se trata de energías tan potentemente
donde deja presente su huella, jamás se extinguirá. El sentimiento de
Unidad, una vez ha sido liberado dentro del hombre, se convierte en una
fuerza expansiva que ya no puede menguar jamás, va ascendiendo
constantemente. Entonces pasa de lo subjetivo a lo objetivo, sin que
la persona que lo está haciendo se dé cuenta de ello, porque se produce
por Irradiación. No por tratar de convencer a los demás de la bondad de la
estructura donde yo me he situado, sino para comprender en totalidad, en
absoluta complacencia, que todo cuanto se está desarrollando es
persiguiendo un fin unitario. Por ejemplo: el Amor, la Verdad, Dios, la
meta suprema de todas las aspiraciones humanas. Hay que entonar ese canto
de libertad interna que se trasluce ya - si se tienen los ojos bien
abiertos - dentro de grandes sectores humanos y está llegando incluso
a las partes más densas de la población, a esta gran masa de seres humanos
que no han tenido oportunidad de evolución porque han encontrado la
resistencia del medio opresor, como sucede con el caso de las minorías
raciales. Todo esto tendrá que desaparecer partiendo -precisamente-
de los grupos místicos, espirituales y esotéricos. De no ser así,
será imposible realmente que el mundo pueda tener paz, fraternidad y
justicia.
Estamos
realizando conjuntamente un gran experimento, un experimento de
Unidad. No se trata de estar reunidos juntos cantando un "Salve al
Creador, sino que se trata de estar unidos sin cantar. Sin hacer otra
cosa que estar unidos, dándonos cuenta que todos perseguimos lo mismo y
que por lo tanto la integridad, la justicia, la Verdad de Dios, se sentirá
alterada si continuamos trabajando de una manera muy parcial, no unitaria,
dentro de nuestra propia estructura, aquella estructura donde
nosotros nos hemos situado. Y esta oportunidad no es por la llegada de
Vicente Beltrán ni mucho menos, es porque existe en latencia en el corazón
de todos ustedes acá, dentro del gran contexto general del pueblo
argentino, porque la respuesta la veo en todas partes: en Buenos Aires, en
Rosario, en Santa Fe, en Corrientes, en Posadas, acá en Ober
respuesta. Quizás la respuesta no sea idéntica en todos esos lugares
porque depende de la idiosincrasia de las personas y también de la
evolución general de estas regiones que estamos visitando. Depende sólo
del estímulo primario, por decirlo de alguna manera, que es la Voz de Dios
o la conciencia mística en cada ser humano. Cada cual según su propia
evolución la desarrollará a su manera, pero existe un canto perenne de
libertad y de justicia en el corazón del hombre que trata de
manifestarse. Esto reconocido, es lo esencial. Sabemos que todos
buscamos lo mismo y que estamos separados no por razones de tipo
espiritual, sino de tipo parcial. Es lo que decíamos esta ma
árbol no puede luchar con otro árbol, sabiendo que est
suelo", y nosotros que somos seres humanos y estamos enraizados en la
conciencia de Dios: ¿Cómo vamos a luchar? Es antinatural, es antiético, es
antisocial. Bien, esto, entiendo yo, es lo que hay que hacer. Pasar
de lo subjetivo a lo objetivo, es Irradiar aquel propósito insigne que nos
da Vida y nos sitúa más allá de nosotros
mismos.