Namaste a todos!
Hoy siento compartir con Uds la historia de la
Navidad tan Mágica como se recibió,
develada en un Encuentro de Símbolos de
Luz,
y con ella desearles Feliz Navidad a
todos los seres que lean este mensaje!
Que esta Navidad se llene de Luz Divina con la
Llama de la
Navidad!
En Amor Divino
En Dios
Cris
La Llama de la Navidad
Canalizado en vivo por Cristina Di Martino
en un encuentro de Símbolos de
Luz

Aparece un Ángel, tiene cabellos muy Hermosos y
largos de color blanquecino,
una túnica Iluminada y en sus manos tiene algo
que Ilumina.
Me dice: "Yo soy el Ángel de la
Navidad."
Abre las manos y me muestra una Llama, es la Llama de
la Navidad.
Me dice: œMira!"
El Ángel de la Navidad me da la mano y dice:
"Tú quieres ir a ver cómo fue aquella Navidad?"
Y digo: Si!
El Ángel tiene ojos transparentes y me dice: "Yo
pondré tu mano en mi mano.
Yo soy el Ángel de la Navidad, hace mucho,
mucho tiempo, en un pequeño lugar, Belén, pasó algo muy especial.
Yo te llevaré, en los Tiempos de los Tiempos
para que puedas ver qué es lo que pasó allí."
El Ángel toca tu Corazón y en ese momento viajas por
los Tiempos de los Tiempos, de la mano de ese Ángel,
hasta llegar a un lugar muy
especial.
María sublime estaba esa noche. Ella sabía que
pariría. Su vientre se había iluminado y bajaron de los Cielos
muchos Ángeles que cantaban Cánticos de Amor
alrededor de Ella.
María estaba Hermosa. Era una noche estrellada, llena
de Luminiscencia.
José había ido a buscar leña y estaba todo preparado,
en ese pequeño gran lugar, porque un Gran Avatar llegaría a la Tierra.
Nacería ese día un Avatar de Luz, y llevaría la
Insignia de Dios, que es la Luz Encendida de Él en su
Corazón.
Ángeles empezaron a cantar.
José regresó, vio que todo estaba Iluminado y cuando
se acerco vio el vientre de María que estaba Iluminado,
se arrodilló ante ella, porque sabía que era el
momento
de recibir a ese Gran Rey de Luz de Dios. Un niño que
llevaba Luz de Dios encendida dentro de sí.
El Niño empezó a nacer, y cuando nació Él tenía Luz.
Su cuerpo estaba totalmente Iluminado.
Los Ángeles cantaban Alabanzas a Dios. Había Hadas
volando y el Cielo se encendió,
ya que una Estrella iluminó más el lugar de lo que ya
estaba iluminado por el cuerpo del Niño que nació.
Su cara era Luz, su piel era
Luz.
Los Ángeles habían hecho un lugar para poner a ese
Niño Resplandeciente mientras que María cantaba y cantaba y
asi le daba la Bienvenida a ese Niño de
Luz.
En ese momento, desde lejos, ese lugar se veía como
una Gran Llama, ya que estaba todo Iluminado,
y lo marcaba una Gran Estrella que lo Iluminaba más
aún.
Allí, en ese lugar, en Belén, el Niño había nacido.
La población del lugar empezó a acercarse, porque una
Llama se había encendido en la Hermosa Colina.
Mucha gente llegó para ver esa Gran
Luz.
Se veía como esa Llama en una Colina Iluminada, era
un momento Mágico, era un momento Perfecto.
La gente llegaba y al ver al Niño iluminado se
acercaba y se arrodillaba.
Mágicamente llegaban pastores con sus rebaños, y los
animales se echaban en las puertas del lugar.
Todo era Regocijo, porque los Ángeles cantaban,
porque los Devas llenaban de Brillos de Colores del Amor
que se veían y salían de ese pequeño lugar donde
estaba ese Niño encendido en la más bella Luz.
Sólo se escuchaba el Cántico de los Ángeles, cuando
de repente se oyeron pasos acercándose,
eran tres Reyes vestidos con ropajes de mucha
envergadura.
Ellos traían en sus manos vasijas onerosas y se
arrodillan a los pies de ese lugar donde estaba el Niño encendido.
María los mira sin hablar. José también.
Los Reyes dicen: "Bendecimos y Honramos a este Niño,
el Rey de la Gran Luz de Dios, Un Avatar de Luz
que ha llegado a este lugar en la Tierra de Belén
para nacer. Una Gran Luz Nueva hay en la Tierra."
Ellos tienen en sus manos unas vasijas muy Hermosas y
dicen: "Esto es para el Gran Avatar que ha nacido."
Uno de los Reyes mira al Niño y pone una
vasija en el suelo. Al ponerla, la vasija se ilumina,
y él dice: "Esto es Mirra, para que siempre
pueda seguir su camino."
Otro Rey se acerca y pone otra vasija en el
piso, ésta también se ilumina
y El dice: "Esto es Incienso, para que ningún
mal se acerque a El."
El último Rey tiene en sus manos una vasija
muy onerosa, y dice: "Esto es Oro."
Lo pone en el suelo y la vasija se ilumina, y dice:
"Para que Brille como el Sol."
Todo era Luz.
Los Reyes le dan una Bendición.
Los Reyes dicen: "Vinimos de muy lejos para encontrar
al Gran Avatar, para traer estos Regalos de Dios, para que siempre, siempre, El
los tenga en sí."
Las vasijas se iluminan aún
más.
Ese día un Avatar nació en la pequeña Belén, que
viviría en Nazareth para ser Jesús de Nazareth.
La Llama de la Navidad se encendió ese día en la
Tierra.
El Angel de la Navidad toca tu corazón y te dice:
œHas vuelto a este Tiempo recordando ese Tiempo, la
historia de ese Niño Bendito que nació la llevarás contigo
como una Bendición para tu vida,
la Llama de la Navidad siempre estará en
ti."
Si sientes distribuir
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use con fines comerciales. Gracias por expandir
Luz!