Junio 22, 2005: Levante su pulgar y sosténgalo con el brazo extendido. No
parece ser muy grande ¿cierto? Pero lo es, al menos lo suficiente para
esconder tres planetas.
Este fin de semana Mercurio, Venus y Saturno se congregarán en una porción de
cielo no mayor que su pulgar. Los astrónomos lo llaman "conjunción" y va a ser
espectacular.

Arriba: Saturno, Venus y Mercurio reunidos en la puesta de Sol del 19 de
junio de 2005. Los tres planetas estarán mucho más cerca en los próximos días.
Crédito de la imagen: Jimmy Westlake de Yampa, Colorado.
El espectáculo comienza la tarde del sábado 25 de junio. Salga de casa y mire
al Oeste hacia el resplandor de la puesta de Sol. Venus aparece primero, como un
punto brillante no muy lejano sobre el horizonte. A medida que el cielo oscurece,
Saturno y Mercurio saltan a la vista. Los tres planetas forman un llamativo
triángulo de casi 1,5° de longitud, que puede ser fácilmente cubierto por su
pulgar.
Se acercan aún más en la tarde del domingo 26 de junio. El triángulo se contrae
con Venus y Mercurio a solo 0,5° de distancia. ¡Ahora caben en su dedo meñique!
La tarde del lunes 27 de junio es la mejor de todas. Con Saturno cerca, Venus y
Mercurio convergen. En su máximo acercamiento, los dos planetas estarán a menos
de una décima de grado de distancia. Tales aparejamientos de planetas brillantes
son literalmente fascinantes.
Si sale al exterior para ver el espectáculo, invite a alguien. Aquí tiene
algunos datos divertidos que puede compartir:
El planeta más cercano al Sol, Mercurio, no es el más caliente. Es Venus. La
temperatura superficial de Venus es de 740° K (870° F), lo bastante caliente para
derretir el plomo. La densa atmósfera de bióxido de carbono del planeta atrapa el
calor solar, que conduce a un descontrolado efecto invernadero. En Venus, el
calentamiento global se ha vuelto frenético.

Arriba: El cielo occidental en la puesta del sol del sábado 25 de junio. Más
mapas celestes: junio 21, junio 22, junio 23, junio 24, junio 25, junio
26, junio 27, junio 28.
Venus es tan brillante debido a que las nubes del planeta son maravillosos
reflectores de la luz solar. A diferencia de las nubes de la Tierra, las cuales
son de agua, las nubes en Venus son de ácido sulfúrico. Flotan en la parte
superior de una atmósfera donde la presión alcanza 90 veces la presión del aire
en la Tierra. Si usted viajara a Venus, sería aplastado, asfixiado, derretido y
fundido —no necesariamente en ese orden. Mejor no vaya.
Mercurio es solo un poco mejor. Al mediodía, la temperatura superficial alcanza
700° K (800° F). Si enciende el horno de su cocina a esa temperatura, la pizza se
quemará y será un antojito humeante. Los radares en la Tierra han rebotado en
Mercurio y encontraron reflejos de hielo cerca de los polos del planeta. ¿Cómo
puede existir hielo con tanto calor? La nave espacial MESSENGER de la NASA está
en camino a Mercurio para investigarlo.
He aquí un truco para engañar a un astrónomo: Muéstrele una imagen de
Mercurio y pregúntele qué es. Muchos contestarán "la Luna", ya que la Luna y
Mercurio son muy parecidos. Pero Mercurio tiene algo que la Luna no tiene:
grandes riscos sinuosos llamados "acantilados irregulares" (scopulus). Algunos
investigadores creen que las pendientes de Mercurio son como las arrugas en una
pasa, una señal de encogimiento. ¿Un planeta que se encoge? Es extraño.
Arriba: Un acantilado irregular en Mercurio, fotografiado por la nave
Mariner 10 en 1974. [Más información]
Si observa a Venus o a Mercurio a través de un telescopio, no se impresionará.
Ambos carecen de rasgos distintivos: Venus a causa de sus suaves nubes, Mercurio
debido a que es pequeño y muy lejano. Saturno es distinto. Incluso un telescopio
pequeño le mostrará los impresionantes anillos de Saturno.
Galileo Galilei descubrió los anillos de Saturno hace casi 400 años, pero no
comprendió lo que veía. Un planeta con anillos era demasiado incluso para
Galileo. Los científicos en la actualidad aún se asombran. Los anillos de Saturno
son increíblemente delgados. Si usted fabrica un modelo de Saturno a escala de un
metro, los anillos serían 10.000 veces más delgados que una navaja de afeitar.
Están llenos de ondas, rayos y ranuras extrañas. Además nadie sabe de dónde
vinieron.

Arriba: Los anillos de Saturno vistos de canto. Crédito de la imagen:
Cassini. [Más información]
Una escuela de pensamiento sostiene que los anillos de Saturno son residuos de
la desintegración de una pequeña luna o asteroide de hace solo algunos cientos de
millones de años. Tan recientemente como en la Era de los Dinosaurios en la
Tierra, Saturno pudo haber sido un planeta desnudo —¡sin anillos! Las lunas
pequeñas que orbitan actualmente entre los anillos parecen estar robando el
impulso angular, lo cual, con el tiempo, podría causar que los anillos
colapsaran. ¿Es Saturno como una flor, temporalmente en floración?
Ese es uno de muchos interrogantes que están siendo investigados por la nave
espacial Cassini de la NASA, la cual ha estado orbitando Saturno desde el 2004.
Cassini se encuentra en una misión de 4 años para estudiar las lunas de Saturno
(las 34), los anillos y el clima. Cada día la nave emite imágenes asombrosas a la
Tierra: haga un clic aquí para verlas.
Mucho puede suceder detrás de su pulgar. Este fin de semana es un buen momento
para investigarlo.
|