Por: Charles Q. Choi / LiveScience.com
Especial para LiveScience

El cuerpo humano brilla, literalmente, al emitir una luz visible en
cantidades extremadamente pequeñas, en niveles que aumentan y disminuyen con el
transcurso del día, revelan ahora los científicos.
Investigaciones anteriores han mostrado que el cuerpo emite una luz visible,
1,000 veces menos intensa que los niveles a los cuales somos sensibles a simple
vista. De hecho, prácticamente todas las criaturas vivientes emiten una luz muy
débil, la cual se piensa que es consecuencia de reacciones bioquímicas que
involucran radicales libres.
(Esta luz visible difiere de la radiación infrarroja - una forma invisible de
luz - que es provocada por el calor corporal).
Para aprender más sobre esta tenue luz visible, científicos en Japón
utilizaron cámaras extraordinariamente sensibles, capaces de detectar fotones
individuales. Cinco hombres veinteañeros y sanos que se ofrecieron como
voluntarios fueron colocados con el torso desnudo frente a las cámaras en
completa oscuridad, en habitaciones herméticas a prueba de luz, durante 20
minutos cada tres horas, de las 10:00 a.m. a las 10:00 p.m. durante tres
días.
Los investigadores descubrieron que el brillo corporal aumentaba y disminuía
durante el transcurso del día, donde el punto más bajo se registró a las 10:00
a.m. y el más alto a las 4:00 p.m., para descender gradualmente después de eso.
Estos hallazgos sugieren que hay una emisión de luz vinculada a nuestro reloj
corporal, de forma más probable debido al modo en que fluctúan nuestros ritmos
metabólicos a medida que avanza el día.
Los rostros brillaban más que el resto del cuerpo. Esto podría deberse a que
el rostro es una parte más bronceada que el resto del cuerpo, ya que está más
expuesto a la luz solar -el pigmento detrás del color de la piel, la melanina,
tiene componentes fluorescentes que podrían aumentar la minúscula producción de
luz del cuerpo.
En vista de que esta luz tenue está vinculada al metabolismo del cuerpo, este
descubrimiento sugiere que las cámaras que pueden detectar las emisiones débiles
de luz podrían ayudar a descubrir padecimientos médicos, dijo el investigador
Hitoshi Okamura, biólogo especializado en ritmos circadianos en la Universidad
de Kioto en Japón.
"Si se puede ver el destello que emana de la superficie del cuerpo, se podría
ver el estado en que se encuentra todo el cuerpo", indicó el investigador Masaki
Kobayashi, especialista biomédico en fotónica en el Instituto de Tecnología de
Tohoku en Sendai, Japón.
Los científicos detallaron sus hallazgos en línea, en la publicación PloS
ONE, el 16 de julio.
Después de 70 años la ciencia redescubre que
el cuerpo humano posee una luminosidad, que puede ser fotografiable a través
de un sistema que está siendo implementado en hospitales e
instituciones de salud y en países como Rusia, Argentina, España, Francia, Cuba,
EE.UU., Panamá, Colombia, Chile, Uruguay, Perú, Brasil y otros tantos.
UN POCO DE HISTORIA
En 1939 el ingeniero Semyon Dadidovich Kirlian estaba arreglando un aparato para electroterapia en su
laboratorio de investigaciones en Ucrania. Por casualidad acercó demasiado la
mano a un electrodo, el cual le provocó un shock y simultáneamente un gran
destello de luz procedente de un chispazo. Sorprendido, colocó su mano tras una
lámina de papel fotosensible y la fotografió. Al revelar la película, unas
emanaciones parecidas a un halo rodeaban las puntas de sus
dedos.
El logro de los esposos Kirlian, al fotografiar la
pequeña radiación magnética, que mide apenas unos milímetros, fue realmente
revolucionario. Esta radiación tiene su origen en el desenvolvimiento de los
átomos que componen el cuerpo humano. Todos ellos poseen un núcleo compuesto de
protones, neutrones y muchas más partículas subatómicas. Alrededor de este
núcleo giran los electrones a una velocidad de 300.000 km. por segundo,
describiendo órbitas elípticas. Los electrones tienen carga eléctrica negativa y
los protones del núcleo carga positiva, lo cual genera distintas magnitudes
según cual sea su configuración atómica. De este modo, cada cuerpo aparece
circundado por un campo magnético generado por los átomos que lo
componen.
Toda materia (liquida, gaseosa y
sólida), está formada por átomos. El átomo está compuesto por un núcleo de
protones (carga positiva) neutrones (carga neutra) y otras partículas
subatómicas que todavía no se conoce su función. Alrededor de este núcleo giran
en distintas órbitas los electrones (carga negativa).
La orbita más
alejada del núcleo es la de más energía y se llama órbita superior. La luz se
forma cuando se aplica energía sobre un átomo, esto se llama excitar al átomo,
entonces hace que los electrones salten de una órbita inferior a otra superior o
fuera del átomo, cuando este electrón vuelve a entrar en una órbita inferior
elimina el exceso de energía en forma de fotón, (radiación electromagnética)
pequeños corpúsculos que se trasladan por medio de movimientos ondulatorios,
cuando estos fotones chocan con otros átomos se emiten dos fotones más
produciendo una avalancha.
Cuanto más grande es el salto del
electrón hacia una órbita inferior más va a ser la energía liberada en el fotón
y más corta será la longitud de onda, esta se mide en nanómetros. Esta longitud
de onda puede ser visible o no. Es visible cuando se ubica en los 370 a 680
nanómetros máximo. La energía de los humanos excita los átomos del cuerpo físico
emitiendo fotones (esto sería el campo bioplasmático) logrando una luminosidad
determinada y que aumenta cuando mas poderoso es nuestro campo energético. Las
personas que meditan, realizan Reiki, Shiatsu, Bioenergía, etc. Producen un
contacto con el cuerpo bioenergético y canalizan sus energías por los sectores
eferentes aumentando su Bioenergía, y se amplia su longitud del campo
radiante.
La longitud de onda del campo bioplasmático no puede
verse por nuestros ojos habitualmente. La cámara Kirlian tiene un conversor de
frecuencias que se usa para combinar la longitud de onda del campo bioplasmático
con una del oscilador de la cámara obteniendo la longitud resultante que se
ubica dentro de la longitud de onda visible.
El sistema de
electrofotografía llamado Kirlian utiliza un sistema electrónico para producir
en alta frecuencia un potencial alto, pero de baja intensidad. Este potencial
se aplica a la placa de exposición,
previamente aislada, donde luego se coloca una película fotográfica de 35 mm. en
la cual se imprime la huella digital y se utiliza para visualizar el campo
bioplasmático de los dedos, ya sea de las manos o de los pies con la finalidad
de analizar las formas policromáticas y morfológicas del campo bioenergético.
El “Efecto Kirlian” está definido científicamente como la observación
visual, o por medio de aparatos, de la descarga de gas (halo luminoso) que surge
cerca de la superficie del objeto estudiado al colocarlo en un campo eléctrico
de alta tensión pero de baja intensidad.
¿Porqué es necesario
introducir el objeto estudiado en un campo eléctrico?
Como el campo
bioeléctrico, emite una luz tan tenue que resulta invisible al ojo humano,
no puede ser observado ni registrado por aparatos comunes, solo por aquellos
extremadamente sensibles a la luz. Sin embargo, al someterlo a un
campo eléctrico determinado, éste emite luz, volviéndose por lo tanto
visible.
El efecto Kirlian es también conocido en el mundo
científico como el “efecto corona” por la forma de corona que emite el campo
eléctrico de los dedos, y como “visualización de descarga de gas”, porque
la capa de aire que se encuentra entorno al dedo se ioniza con la descarga
eléctrica, permitiendo la visualización del campo
bioeléctrico.
LIBERACION DE SUSTANCIAS QUÍMICAS EN NUESTRO
ORGANISMO
Como resultado del metabolismo celular de nuestros
cuerpos diversas sustancias químicas son liberadas y exhaladas en la forma
de gases o vapores por los poros de la piel, como sudor, urea, etc., y también
las feromonas.
UN ESPECTROFOTÓMETRO GENERA UN ESPECTRO DE
COLORES Y ESTRUCTURAS DIVERSAS
Un espectrofotómetro es un
instrumento usado en la física óptica que sirve para medir, en función de la
longitud de onda, la relación entre valores de una misma magnitud fotométrica
relativos a dos haces de radiaciones lumínicas. La Fotometría es la ciencia que
se encarga de medir la intensidad de la luz en función del brillo percibido por
el ojo humano.
Este instrumento tiene la capacidad de proyectar un haz de luz
monocromática a través de una muestra y medir la cantidad de luz que es
absorbida por dicha muestra. Esto le permite al operador realizar dos
funciones:
1. Dar información sobre la naturaleza de la
sustancia en la muestra.
2. Indicar indirectamente que cantidad de la
sustancia que nos interesa está presente en la muestra.
La luz,
¿ondas o partículas?
Las ondas de luz, como las de los rayos X, no
se pueden emitir de una en una, sino sólo en paquetes llamados "cuantos". La
ciencia que lo estudia es la mecánica cuántica.
Estos tipos de radiación de
alta frecuencia, según cómo se observan, se comportan como partículas y, al
mismo tiempo, como ondas. Las partículas de la luz son los fotones. No tienen
masa y viajan a cerca de 300.000 km/s.
La luz blanca está compuesta de ondas
de diversas frecuencias. Cuando un rayo de luz blanca pasa por un prisma se
separa en sus componentes de acuerdo a la longitud de onda así:
La
longitud de una onda es la distancia entre dos crestas consecutivas. Describe
cuán larga es la onda. La distancia existente entre dos crestas o valles
consecutivos es lo que llamamos longitud de onda. Las ondas de agua en el
océano, las ondas de aire, y las ondas de radiación electromagnética tienen
longitudes de ondas.
La letra griega "λ" (lambda) se utiliza para
representar la longitud de onda en ecuaciones. La longitud de onda es
inversamente proporcional a la frecuencia de la onda. Una longitud de onda larga
corresponde a una frecuencia baja, mientras que una longitud de onda corta
corresponde una frecuencia alta.
Las ondas de radiación
electromagnética que forman la luz visible tienen longitudes de onda entre 400
nanómetros (luz morada) y 700 nanómetros (luz roja).
Ionización de gases en la cámara Kirlian
Dr.
Konstantin Korotkov, PhD, ex-Director del Departamento de Física de la
Universidad de San Petersburgo, en Rusia, descubrió en 1969 la ionización de los
gases y/o vapores en las Cámaras Kirlian. Este hecho puede ser demostrado por
medio de un Espectrofotómetro.
Campo Bioplasmático o energía
humana.
Actualmente la Kirliangrafía está siendo ampliamente
utilizada en psiquiatría, porque proporciona al médico un preciso perfil
psicológico del paciente sin necesidad de someterlo a muchas consultas de sondeo
que en ocasiones hacen desistir del tratamiento al paciente. En este caso
el paciente se siente resguardado de cualquier agresión química al que pueda ser
sometido porque solo se traba de la toma fotográfica de los dedos de las manos.
Es importante tomar la fotografía de los diez dedos ya que en cada
uno está representado holográficamente la información de los distintos sectores
del organismo. Los órganos emanan un tipo de vapor o gas que forman determinadas
estructuras geométricas que la película fotográfica capta y luego se plasma en
papel fotográfico para que el técnico especializado en Bioelectrografía Kirlian
pueda analizar y conformar un diagnóstico completo del estado físico, emocional,
psiquico y espiritual del individuo. El campo bioplasmático forma un mapa
polifórmico y policromático que debemos analizar cuidadosamente ya que cada
forma y color representa a una patología determinada y su
estado, complemento indispensable de cualquier tratamiento
médico.