La imagen propia resulta en dolor.
16 DE
JULIO.
¿Por qué dividimos los problemas en mayores y menores? ¿Acaso no es
todo un problema para nosotros? ¿Por qué los convertimos en problemas pequeños o
grandes, esenciales o no esenciales? Si pudiéramos comprender un problema,
investigarlo bien a fondo por pequeño o grande que fuera, pondríamos al
descubierto todos los problemas. Ésta no es una respuesta retórica. Tome
cualquier problema: ira, celos, envidia, odio; los conocemos muy bien. Si
investiga muy profundamente la ira, si no se limita a ignorarla, ¿qué es lo que
ella implica? ¿Por qué es uno irascible? Porque se siente lastimado, porque
alguien le ha dicho algo desagradable; y cuando alguien le prodiga una alabanza,
eso le complace. ¿Por qué se siente uno lastimado? La importancia propia,
¿verdad? Y ¿por qué existe la importancia propia?
Existe a causa de que
tenemos una idea, un símbolo de nosotros mismos, una imagen de lo que uno
debería ser, de lo que uno es o no debería ser. ¿Por qué creamos una imagen de
nosotros mismos? Porque jamás hemos estudiado lo que somos realmente. Pensamos
que deberíamos ser esto o aquello, el ideal, el héroe, el ejemplo. Lo que nos
provoca ira es que ataquen nuestro ideal, la idea que tenemos acerca de nosotros
mismos. Esa idea es un escape del hecho de lo que somos. Peto cuando uno observa
el hecho real de lo que uno es, nadie puede lastimarlo. Entonces, si usted es un
mentiroso y le dicen que es un mentiroso, eso no significa que se sienta
lastimado; se trata de un hecho. Pero cuando está pretendiendo que no es un
mentiroso y le dicen que lo es, se pone furioso, violento. Así, estamos viviendo
siempre en un mundo de ideas, de mitos; jamás vivimos en el mundo de los hechos.
Para poder observar lo que es, para verlo, para familiarizarnos realmente con
ello, no debe haber juicio alguno, ni evaluación, ni opinión, ni
miedo.
KRISHNAMURTI.